Los excipientes son sustancias inertes que se mezclan con principio(s) activo(s) para conformar los medicamentos y así darles consistencia, forma, sabor u otras cualidades que faciliten su dosificación y uso.. Estos componentes pueden ser de diferentes tipos:
- Colorantes, conservantes, coadyuvantes, estabilizantes, espesantes, emulsificantes, saborizantes, sustancias aromáticas o sustancias similares.
- Componentes del recubrimiento externo de los medicamentos destinados a ser ingeridos por el paciente o administrados de cualquier otra forma (cápsulas, cápsulas de gelatina, cápsulas rectales, etc.).
- Componentes de los parches transdérmicos.
- Mezclas de excipientes, como los utilizados en la compresión directa o en el recubrimiento o en el pulido de formas farmacéuticas orales.
- Reguladores del pH.
- Componentes de tintas utilizadas para marcar las formas farmacéuticas orales.
- Diluyentes presentes, por ejemplo, en extractos de plantas o en concentrados de vitaminas.
- Componentes presentes en la mezcla de compuestos químicamente relacionados (por ejemplo, conservantes).
En general, se considera que los excipientes son “inertes”. Si bien es deseable que los excipientes tengan poca o ninguna acción farmacológica propia, algunos pueden tener una acción o efecto reconocido en determinadas circunstancias.
De acuerdo a la normativa vigente, la ficha técnica, prospecto y etiquetado de los medicamentos autorizados en España deben contener la información más actualizada sobre los excipientes de declaración obligatoria, asegurando que los profesionales sanitarios y pacientes disponen de la información necesaria para un uso correcto y adecuado de los medicamentos.